6º Parte De "El Misterio De Aresea"

¡Hola, marineros!


Hoy, como cada viernes os traigo otro capítulo de nuestra historia.(Por cierto, hoy también estaba lloviendo al ir a la biblioteca...) xD
Bueno, aquí os lo dejo:

El Misterio De Aresea

---------------------------------------

Las clases de la señorita Chester eran constantes y muy repetidas. Siempre dábamos los mismos temas y no podíamos ni rechistar. Después de unos eternos minutos, tocó el timbre y todos salieron corriendo al recreo, sin prestar atención a las últimas explicaciones que había dado la señorita Chester.

***

Me dirigí hacía el árbol donde siempre nos reuníamos Elizabeth, Jude y yo, aunque Jude vendría más tarde. Al llegar al árbol, lo primero que preguntó Elizabeth fue lo mismo que cuando me vio salir del sótano.

-No sé de qué pantera me hablas...-dije.

-No te hagas la tonta-respondió Elizabeth-Sé que viste algo.

Me quedé en silencio, sin saber qué decirle.

-Seguro que estaba soñando...-respondí, pero no pareció muy convincente.

-Por Dios, Kris. Te conozco bien y sé que no eres sonámbula.

Le dije la verdad, ya que estaba harta de mentir.

-Bueno, sí. Vi una pantera...-Le confesé.

-¡Já! Lo sabía, te conozco demasiado bien. Fue en el bosque, ¿Verdad?

Sin mentir le contesté.

-Sí, fue en el bosque. No podía despegármela, quería venir conmigo- hice una pausa. Por eso me la traje...

-¿Y dónde está?-preguntó interrumpiéndome.

-Déjame acabar. Cuando volví la dejé en el sótano, pero al volver ya no estaba.

-¡¿Cómo puede ser?!-dijo aterrorizada-Si la señorita Cuervo llega a verlo, no quiero pensar lo que pasaría...

-Sí, puede que tengas razón...

En ese momento llegó Jude y después de saludarlas con una sonrisa y un "hola", empezó a explicarles el por qué de su tardanza.

-Perdonadme damiselas en apuros. ¿Vuestro príncipe ha llegado en un momento inoportuno?-dijo con ironía-Estaba luchando contra cuervos y ogros. ¿Sabéis a lo que me refiero, verdad?

-Cómo no. Siempre estás castigado gracias a tus tonterías-respondió Kris.

-Bueno, antes de que os interrumpiera, ¿de qué estabais hablando?-preguntó.

Entonces, Elizabeth y yo se lo explicamos todo, sin perdernos un detalle de lo que me sucedió en el bosque.

-Wow-dijo Jude sorprendido-¡Una pantera!

-Sí Jude, una pantera. Y todo pasó por tu culpa.

-¡¿Mi culpa?!-protestó.

-Sí, por tu culpa. Si no me hubieras tentado a ir al bosque, no me lo habría encontrado y tampoco se hubiera perdido.

-Puede ser que sólo se haya ido al bosque para cazar algo-dijo Elizabeth.

-Pero puede que reaparezca para volver a mí por este colgante-dije sacándome el colgante.

Ambos miraron perplejos el colgante.

-¿De dónde lo has sacado?-preguntó Jude.

-Lo llevaba la pantera, pero se lo cogí mientras bebía leche.

De pronto, sonó el pesado y sonoro timbre. Me guardé el colgante, sintiendo cómo brillaba.

Llegó de nuevo la hora de clase.

Todos los días era la misma rutina; estudiar, comer, otra vez estudiar, cenar y dormir.

Ese día se me pasaron las clases rápidamente y llegó la hora de ir a la cama.

Antes de quedarme dormida, sentí cómo el colgante brillaba de nuevo, no vi cómo brillaba, pero cuando me quedé dormida vi una oscuridad acompañada de una misteriosa y grisácea niebla...

Continuará...